aqui estamos!

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"NADIE PUEDE SER FELIZ SIN PARTICIPAR EN LA FELICIDAD PÚBLICA, NADIE PUEDE SER LIBRE SIN LA EXPERIENCIA DE LA LIBERTAD PÚBLICA, Y NADIE, FINALMENTE, PUEDE SER FELIZ O LIBRE SIN IMPLICARSE Y FORMAR PARTE DEL PODER POLÍTICO"

HANNA ARENDT

"LO IMPORTANTE ES QUE PODAMOS DISCUTIR, RAZONAR Y ENTONCES, NO HACER SOLAMENTE EJERCICIO POLITICO DE OPOSICIÓN, SINO ESCENCIALMENTE TRABAJAR POR LOS INTERESES DE NUESTROS REPRESENTADOS"

CRISTINA FERNANDEZ

miércoles, 1 de febrero de 2012

Opinión Política

Las ideas y la experiencia social
Publicada en el Diario Página 12 el 17 de enero del 2012

Por Alejandra Rodríguez

"Actuar con el pensamiento es propio de todos, por ende, de nadie en particular (...) En este sentido, nadie tiene derecho a hablar como intelectual, lo que equivale a decir que todo el mundo lo es.” Jacques Rancière

El debate en torno de la figura del intelectual y su relación con el poder político es de larga duración. Esta tensión es reavivada por algunas situaciones que despuntan cada tanto en la escena pública; son ejemplo de ello en estos últimos días, la entrevista a José Pablo Feinmann en el diario La Nación y la aparición de Plataforma 2012, así como lo ha sido en su momento el cruce entre Vargas Llosa y Horacio González o la participación de Beatriz Sarlo en el programa televisivo 6,7,8.
Una de las características sobresalientes de este proceso político es justamente la aparición pública de los denominados y autodenominados intelectuales. A partir de esto nos permitimos reflexionar acerca de la condición del intelectual y su relación con la vida social, en tal caso, repensar esta denominación distintiva arraigada en el sentido común que les otorgamos a ciertas personas cuando las definimos como “intelectuales”.
Una primera aproximación al concepto “intelectual” admite la existencia de personas con determinadas características diferenciales en relación con otros. Ser un intelectual supone el ejercicio del intelecto, por lo tanto son intelectuales aquellos que trabajan con el pensamiento y las ideas. En muchos casos el término intelectual es utilizado como sinónimo de “académico”. Por otra parte, existe una idea romántica e iluminista en torno del intelectual, aquella persona que en soledad es capaz de gestar las ideas más brillantes y originales, por lo tanto es necesario que éste mantenga cierta distancia de la masa social, del poder político y de los medios masivos de comunicación para garantizar un pensamiento critico, complejo y original. La soledad es la garantía para que esto suceda. En esta línea, los intelectuales requieren del reconocimiento y valoración de sus ideas, y eso es legítimo, siempre que se considere que las ideas son propiedad de una cabeza ilustrada, reflexiva e iluminada.
En este sentido quisiéramos replantearnos esa posición frente a las ideas, ya que consideramos que éstas son productos de contextos socioculturales, de relaciones intersubjetivas y actos de comunicación que suceden entre las personas de una comunidad. Las ideas son sociales.
Los pragmatistas norteamericanos: Holmes, James, Pierce y Dewey, tenían diferencias personales y filosóficas, pero compartían una idea sobre las ideas, ellos creían que las mismas no están “ahí” esperando ser descubiertas, sino que son herramientas –como los tenedores, los cuchillos y los microchips– que las personas crean para hacer frente al mundo en que se encuentran.
Desde esta perspectiva todos somos intelectuales porque todos somos capaces de pensar; el pensamiento no es privativo de nadie, por más trayectoria académica que una persona posea. Este posicionamiento nos lleva a cuestionar la doxa, esa opinión que otorga autoridad a los intelectuales para intervenir en las cosas de la política. El proceso político transformador que estamos transitando necesita ser profundizado con constructores pensantes, por eso creemos que es necesario reconfigurar esa posición sostenida de que sólo aquellos habilitados y formados para pensar son los que pueden otorgar legitimidad o cierta claridad lumínica a los acontecimientos sociales. El tiempo que transcurre no necesita ser iluminado por los que piensan, como si fuesen una parte externa del mismo, un grupo de voyeurs hermeneutas, cuya racionalidad que sobrevuela el común de las personas es la indicada para develar y explicar el sentido de las contiendas políticas y culturales. El alumbramiento sucede en las múltiples expresiones comunicativas y en el carácter de autorreflexividad colectiva que los pueblos tienen producto de la experiencia social compartida.
En estas posiciones se dirime la sintonía fina de la disputa cultural del presente, un tiempo en el que la originalidad y la soledad del pensamiento (si es que esto fuese posible) no son valores primordiales. La generosidad de este momento político nos demanda la construcción de artilugios teóricos, discursivos y retóricos que sean interpelados en su aplicabilidad social, no para explicarles a los “no intelectuales”, ni para contribuir a la interpretación de lo que va sucediendo, sino para comprender colectivamente el devenir de este tiempo y el horizonte de nuestra experiencia. Esta comprensión de conjunto se construye en la vida social, no en la cabeza o la voluntad de una o algunas personas. La producción de igualdad es una tarea que nos debemos también en este sentido. Como sociedad nos queda el desafío de reinventar nuevos modos de producción de conocimiento, nuevos modos de pensar la relación entre el campo de las ideas y la experiencia social.


Alejandra Rodriguez es integrante de la RED MUJERES CON CRISTINA y del colectivo PENSAMIENTO MILITANTE

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6 comentarios:

Esteban dijo...

Lei esta nota en Pagina 12 cuando salíó, me pareció excelente, clara, simple, con belleza literaria y con contenido político. Felicitaciones a la compañera Alejandra Rodríguez.

Lucia dijo...

Coincido con este planeo de la voz social que recrea el pensamiento y la reflexión sin ser privativo de algunos, sino colectivamente elaborado, pensado y actuado.-
A propósito de un tema a evaluar en este proceso que vivimos como ciudadan@s argentin@s, planteo para la reflexión, las posiciones que expresa nuestra Presidenta como dirigente de 40 milones de argentinos y el titular actual de la CGT de los trabajadores, el compañero Moyano padre.- No logro entender a muchos acólitos de este maravilloso para mí, momento histórico, que se asustan de estas tensiones pragmáticas, tan democráticas y previsibles cuando de luchar por el equilibrio se trata. Es la sana y necesaria expresión de quienes como dirigentes toman la coyuntura histórica desde el lugar que a cada uno le corresponde. No hay pelea, hay diferenes enfoques y cada uno desde su lugar expone con honestidad sus puntos de vista. Sería muy necio e hipócrita pensar y decir sin claridad en un escenario político, las distintas posiciones, cuando de actores de semejante relevancia y trayectoria se trata. Como ciudadana convencida de la honestidad de la Presidenta CRistina FErnández de Kirchner y conocedora profunda de su capacidad y conocimiento de los números necesarios para propender a la inclusión mayoritaria, puede tener una visión y elaborarla estrategicamente y del otro lado el compañero Hugo Moyano entender que las ingentes ganancias que están teniendo los empresarios tambien propendiendo a una mayor inclusion entender que sólo con una presión legal o diferente estrategia esto se puede lograr. Son mecanismos diferentes pero con un mismo objetivo y eso es el cambio maravilloso. Pensar y trabajar para la inclusión. Tan contraria al liberalismo propuesto en otros lados del mundo.- De esta tensión saldrá la solución y el camino a elegir, sin austarnos ni imaginar rupturas. Estamos construyendo democracia e inclusión y del acierto en las formas surge la conclusión beneficiosa. Lo importante es que ambos tiran para el mismo lado en un objetivo común, nuestro bienestar. Por lo menos a mí no me caben dudas de la buena intención de ambos, estimadas kompañeras.- Gracias por sus reflexivos envíos que agradezco y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.- LUCIA CRUCCI.-

Ana María dijo...

ADHIERO A LOS CONCEPTOS. AUTODENOMINARSE INTELECTUAL ES UN ACTO DE SUPREMA SOBERBIA, ES ELEVARSE SOBRE UN PEDESTAL SOBRE LOS OTROS Y CREERSE INCUESTIONABLE, INIMPUTABLE, SUPERIOR, ILUMINADO; ES MENOSPRECIO POR LOS DEMÁS Y CREER PODER PRESCINDIR DEL COLECTIVO SOCIAL, CUANDO ES ÉSTE PRECISAMENTE QUIEN OTORGA A UN SUJETO EN PARTICULAR LA DENOMINACIÓN DE INTELECTUAL, VALE DECIR, ES UN RECONOCIMIENTO SOCIAL

EVIDENTEMENTE QUEDAN SECUELAS DE LA DICTADURA, CUANDO SER MILITAR ERA SER ARISTÓCRATA, POR ESO TANTA RESISTENCIA Y, LA PALABRITA DE MODA, TANTA "CRISPACIÓN" A LA BÚSQUEDA DE IGUALDAD, DE DAR "VISIBILIDAD" A LOS MENOS AFORTUNADOS INTELECTUALMENTE, A LOS QUE HAY QUE EDUCAR COMPARTIENDO PENSAMIENTOS, NO MARGINÁNDOLOS MÁS.

ESTAS REACCIONES DESTEMPLADAS NOS HACEN VER QUE "EL REY ESTÁ DESNUDO", MEDIR LA MEDIOCRIDAD INTELECTUAL EN LA QUE ESTAMOS TODOS INMERSOS, PUESTO QUE TARDAMOS EN VER QUE NUESTROS OTRORAS ÍDOLOS O SERES ADMIRADOS TENÍAN PIES DE BARRO.

Laura, nodo central dijo...

muy bueno el articulo y los comentarios que anteceden a este!! Agrego que para comprender colectivamente el presente que estamos viviendo y el valor de la experiencia social que venimos transitando requiere involucrarnos en una acción que privilegie la comunicación y el diálogo asumiendo el disenso como herramienta de construcción orientada diseñar y proyectar lo comun, saber popular que expresa de manera potente y democratica lo que sabemos, lo que pensamos y lo queremos.

Sandra dijo...

Quiero felicitar a la autora de la nota, es muy buena, abre ideas muy potentes expresadas con claridad.

Dora, de San Martín de los Andes dijo...

"Es preciso tener en cuenta, que no se puede emprender nada más difícil, de éxito más incierto y más peligroso en su gestión, que el querer ser un líder"- Maquiavelo.El concepto de intelectual ha adquirido una nueva dimensión en la época contemporánea. Hay nuevas necesidades, nuevos retos de la sociedad. Cambia su rol, su conciencia y sus campos de actuación. Éstos se han ampliado en función de esas necesidades. Ya no tenemos al intelectual , recluído en su estudio y con la única función de reafirmar personalmente su saber.Por el contrario, debe usar esos conocimientos, para cambiar las cosas, para luchar por la justicia. Cortázar le da al intelectual, una significación y una utilidad de neto corte político. Subrayando tal importancia, en los movimientos de liberación de América Latina. Para luchar con su saber, contra las dictaduras neoliberales e imperialistas.Por eso se usa el término "iluminado" para definir al intelectual.Es una linterna, que con su luz, se proyecta buscando lo que él considera "verdad"- Jaurecthe es considerado intelectual, y como tal, como todo gran observador de la realidad, cumplió una función central en la apropiación del concepto de nación por las capas populares. Pero eso se logró, al sacar a la calle a la historia y ponerla a disposición de todos.Eso es ser intelectual. Generalmente, los intelectuales van siempre acompañados de una dosis de moralismo y juzgando como si fueran los dioses del olimpo. Esa actitud científica, es la que les hace perder el punto de vista materialista..[..hablan de líder carismático, de demagogia..y reducen todo al facilismo.Pero no se plantean la diversa y compleja trama que todo proceso político lleva en sí.Tienen actitudes escatológicas..] ..[Alguien tiene que avisarles a esta gente, que no se necesita ser un Einsten para llevar un mensaje comprensible.] "Los idiotas ilustrados"-Elogio de la ignorancia-AlejandroDolina, rev. Humor nº 20-marzo de 1979 . Siempre es de más confianza, aquella gente que expresa de manera espontánea sus dichos, como les salgan, sin miedo al rechazo. Últimamente, hemos visto una "élite intelectualista", cuyas palabras exceden nuestra expresión cotidiana, a los que escuchamos como un emisor desdibujado, no lo entendemos!! ..Y para ellos, les tenemos noticias!!:A finales del siglo XIX, en Florida, los trabajadore/as,fabricantes de cigarros, obligaron a sus patrones a contratar lectores, para leerles mientras trabajaban. Estos lectores leían las obras de Bakunin, Marx y otros teóricos radicales, a los trabajadores y trabajadoras, quiénes luego discutían lo leído. Y a principios del siglo XX. vagabundos radicales y sus amigos, establecieron "colegios vagabundos",, donde una amplia variedad de oradores, daba charla sobre cuestiones sociales, filosofía, práctica revolucionaria, incluso ciencia e historia.Y..los vagabundos discutían sobre ello.Acá queda claro el rechazo de, los y las explotadas, a dejar que les fueran arrebatados los instrumentos de la inteligencia. Y este es a mi modo de ver, un ejemplo de la naturaleza de la lucha real contra el intelectualismo, del que hoy en día se jactan personajes tan siniestros como Sarlo , los de Plat.12...y etc... No se trata aquí de glorificar la ignorancia, muy por el contrario, es un rechazo desafiante a ser desposeído de la propia capacidad de aprender, pensar y comprender. Mirándola bajo otra lupa,el intelectualismo al degradar la inteligencia, degrada la capacidad de razonar.Esto se llama racionalismo.Ideología que sostiene que el conocimiento sólo proviene de la razón.Pero al examinarla de cerca, esta racionalización está impuesta , sólo por los que detentan el poder. Es la racionalidad cuantitativa de la economía, la racionalidad de la identidad y la medición, la que equipara y atomiza, las cosas y seres.No reconociendo más relaciones que las del mercado.


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