aqui estamos!

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"NADIE PUEDE SER FELIZ SIN PARTICIPAR EN LA FELICIDAD PÚBLICA, NADIE PUEDE SER LIBRE SIN LA EXPERIENCIA DE LA LIBERTAD PÚBLICA, Y NADIE, FINALMENTE, PUEDE SER FELIZ O LIBRE SIN IMPLICARSE Y FORMAR PARTE DEL PODER POLÍTICO"

HANNA ARENDT

"LO IMPORTANTE ES QUE PODAMOS DISCUTIR, RAZONAR Y ENTONCES, NO HACER SOLAMENTE EJERCICIO POLITICO DE OPOSICIÓN, SINO ESCENCIALMENTE TRABAJAR POR LOS INTERESES DE NUESTROS REPRESENTADOS"

CRISTINA FERNANDEZ

miércoles, 2 de septiembre de 2009

A propósito de la nota de Martín Caparrós en el diario Crítica


Comenzar una nota con la afirmación de que la presidencia de Cristina Fernández es una desgracia para las mujeres es sin duda una provocación irresponsable.
Es un juego que parece gustarle al caballero Caparrós, al que agrega cuotas importantes de cinismo y desprecio por sus semejantes. Las provocaciones, siempre que inviten a la reflexión y a despojarnos de discursos dogmáticos, siempre que estimulen el pensamiento colectivo son oportunas. Pero en este caso, poco importan cuáles fueron las intenciones del periodista, aunque se desprende de su opinión, sin datos que aportan a la información ni referencia a contextos de la vida social de los argentinos, la marcada negativa por instalar un debate en torno a los efectos y realidad de las decisiones políticas que, en materia de género, impulsó el gobierno de Cristina Fernández. El periodista utiliza afirmaciones categóricas, pero también falaces, ¿desde qué lugar sostiene que se retrocedió en las conquistas logradas en los últimos años por las mujeres en nuestro país?
Como mujeres sabemos lo que nos produjo la presencia de Cristina Fernández al mando del Ejecutivo y estamos seguras que muchas lo entienden e irán entendiendo. Comprender lo que se dice de ella y cómo se habla de ella desde las tribunas de la antipolítica más reaccionaria y machista es una experiencia que nos provoca a la acción, es decir a hacernos escuchar
El terreno del cambio cultural es sin duda un terreno de lucha, que no se da de un día para el otro, ni de una vez y para siempre, que tiene sus avances y sus retrocesos, sus aciertos y contradicciones. El camino de este cambio lo construimos nosotras y nosotros sobre la base de una experiencia de gobierno que expandió nuestros derechos, democratizó el país e hizo crecer la economía y la justicia social: las mujeres y los pobres ya habíamos olvidado que esto era posible.
Algunos sectores de la Argentina miran hacia atrás, saben que dicho cambio cultural supone terminar con el chiquitaje de la chicana, el odio y la rivalidad entre ciudadanas/os, acciones de las que siempre sacan provecho. Saben también que el cambio supone el fortalecimiento de nuestra democracia, la posibilidad de debatir política con argumentos más allá de banderías partidarias. Terminar con el juego perverso de los medios y de otros sectores de la oposición que quieren sustituir la acción política pública por un dudoso ejercicio de psicología, analizando los supuestos perfiles psiquicos de los integrantes del gobierno antes que juzgando sus aciertos o desaciertos políticos desde la perspectiva de la sociedad.
Si Cristina es dependiente y sumisa a su marido, o no lo es, poco importa para los destinos del país ¿se definiría toda la crítica política, como se ha hecho con ella hasta el cansancio sobre la base de este hecho psicológico, si se tratara de un presidente sumiso y dependiente de su esposa?.
Más allá de la chicana, que como siempre desvaloriza al pueblo, necesitamos reflexionar por ejemplo sobre las independencias y sumisiones mayores y profundas de nuestra America del Sur. Hemos visto estos días el rol jugado por la presidenta en Bariloche, quien aplicando un modo de plantear y tomar decisiones más propio de nuestro género que de las virilidades discursivas de los caballeros, dio una lección de política práctica y de unidad americana . De eso no habla Caparrós y sin embargo se refiere a Bachellet y a Cristina como “las dos chicas australes". No hubieron muchachos en la reunión de UNASUR, asistieron presidentes, tampoco “chicas”, fueron dos mujeres presidentas que dieron muestra de una habilidad práctica para tratar los conflictos con la cual no siempre parecen de acuerdo los que ejercen poder. Según palabras de Cristina "los hombres tienen reacciones muy fuertes" que son innecesarias, y agregó Bachelet "Es la testosterona”

Nuestra lucha de “sexo débil” se dirige justamente contra el machismo que minimiza majaderamente la palabra femenina aunque algunos intenten disimularlo. Por hábitos heredados de la vida misma, las mujeres siempre somos más participativas en política. El Sr. Caparros sabe que la presidenta no hizo uso de poder para reprimir por ejemplo a piqueteros o reclamos sectoriales, y que durante los gobiernos Nestor Kirchner y Cristina Fernandez la democracia se vivió con mayor participación de la ciudadanía.

La presidenta es una militante política mujer, no una militante feminista. Claro que podría haber tomado banderas feministas, si lo fuera. Cristina entiende que para gobernar bien hay que lograr integrar los reclamos históricos de las mujeres como parte de los intereses de la sociedad toda y, cambiar la cultura es de largo aliento

En el imaginario colectivo de mito y desprecio por el lugar de "esa Mujer"
Caparrós no hace la diferencia. No logra comprender justamente que Cristina Fernandez, por su verba y capacidad nos enorgullece a muchas mujeres argentinas. Esto de péguele a Cristina también fue con Evita y, aunque con un perfil “estético” distinto, nos muestra que algo esta pasando pues “ladran Sanncho…”
¿Qué se le va la lengua? Nuevamente al caballero se le escapa el prejuicio discriminador. Hablar es exponerse, pero es fundamental en política tomar la palabra y poco a poco somos muchas las que nos estamos animando. El que haya una mujer presidenta, con “a” es un gran impulso para todas nosotras.

Qué pena que Caparrós no llegue a comprenderlo

16 comentarios:

Laura dijo...

Tengo un amigo que dice que Caparrós es el Pergollini de los intelectuales.
Y estoy plenamente de acuerdo!!
Provoca y se muestra pedante, pareciera que todos somos una manga de boludos/as que no alcanzamos a ver las cosas como son

Dice Rivas en un fragmento que enviamos: "la centro izquierda se caracteriza por tener buenos comentaristas de la realidad" ahora transformarla es otra cosa. necesitamos la lucidez de muchos para analizar y entender la coyuntura, así lograremos cambiar un poco las cosas, escuchando, dialogando, no desde la tribuna, hay que embarrarse los pies y dejar de ser el que se las sabe todas. eso si es que se quiere comprender un poco lo que está pasando

Beatriz dijo...

Gracias mujeres por decirlo así , es muy importante para todas que se pueda difundir esto

Emilio dijo...

Lo de Caparrós ya trasciende lo lamentable. Ese tipo que no es ningún "caballero" habla para la tribuna de la rural, allí recoje aplausos y garantía de buenos plato de comida por mucho tiempo. Es un vivillo que tenía 15 años cuando llegó la dictadura militar, apenas un roce con la gloriosa UES y con el tiempo casi casi se nos hizo "comandante" pero nada. Nada de eso es el escriba insultante que viene derrapando desde la izquierda, pasa por el peronismo revolucionario -como tanta gente- y sigue su marcha hacia la derecha que cobija y alimenta. Una vergüenza de "periodista". Que ha encontrado su lugar en el firmamento mediático del declinante clarín.

Betty dijo...

Que pena Martin Caparros que tu discurso y tu profunda capacidad de análisis esté tan llena de pelos.
Eramos Compañeros! Compañero ¡y me parece que seguís tan gorila como hace 33 años. Te invito a que te despojes de los prejuicios y hagas un análisis sero. Vos podés.

Liliana dijo...

Cristina es linda, inteligente, preparada, impecable presencia, oradora sin par, trabajadora, y encima peronista, muchos no se lo pueden bancar,además llegó a ser presidenta por elección, es respetuosa de la democracia, muuuucho para los débiles, opinadores del mal, detractores, odiosos que ven todo mal, Cristina te defendemos y no vamos a tolerar que te traen de "esa mujer"

Ernesto dijo...

Es la forma porteña/periodistica/ex lanatica de "escandalizar". Aburren.

Lorena dijo...

ya sabemos que las mujeres nunca sabemos lo que nos pasa si no nos lo dice alguien con capacidad para simbolizar ¿un caballero como Caparrós? y menos aún podemos transformarlo en conceptos, teoría o acciones políticas... me hartan...
Muy buena la nota.

Daniel dijo...

No desaprovechemos esta oportunidad histórica, debemos apoyar ahora y no lamentar después. Lamento que, como ocurre en forma habitual en nuestro país se ataque al que no nos gusta, o no es como nosotros que en este caso se refiere al más despreciable enfoque: el de género.

Nélida dijo...

Parece que algunos "hombres" se sienten un poco alterados con Cristina. Creo que a Caparros algo le pasa: quizás no se perece a mamá, es sexi, es inteligente, habla seriamente, en general es admirada por grandes hombres. En qué modelo ponerla para denostarla esa es la pregunta? No pueden ccon su propia neurosis.

ana dijo...

realemente lo que escribió Caparrós, lamentable, nada de POLÍTICA, lleno de puros "prejuicios".
Sólo deseo que nuestra presidenta no pierda su temple, porque estas cosas lo que buscan es sacarla de las casilla y que se retire. ¡FUERZAS CRISTINA! y nosotras/os como ciudadanía acompañemos a nuestra presidenta de la cual estoy orgullosa

Mariano dijo...

LAMENTABLE!!!..(una vez mas) un "pretendido Pseudo-progre" aspirante a "intelectual"..devenido en Altisimo Gorila Charango de la Suciedad Rural...si esta gente nos odia...quiere decir que vamos BIEN

Compañeros de Cruz del Sur dijo...

Compañeras: Caparrós sufre como muchos "progre" de nuestra sociedad de continuos ataques de "narcisismo" No puede aceptar que los cambios en la sociedad pueden ocurrir de una forma diferente a la que su imaginario urbano le dicta. Especialmente si provienen de algo "indescifrable" o indefinido como el peronismo. Su individualismo y la inteligencia puesta al servicio del compromiso con su propia figura, lo han alejado definitivamente del pueblo. No es para enojarse, creo, sino para sentir alguna pena. Saludos para todas las compañeras.

mariló dijo...

Que necesario resulta escuchar estas voces, que por la negativa o la positiva,nos impulsan a debatir que sociedad queremos y quienes deseamos que sean nuestros interlocutores.
Creo que es el camino,para generar mayor democracia.
Estas son algunas de las razones,que hacen que el proceso iniciado por nestor y continuado por Cristina,se nos vuelva tan importante de sostener y acompañar.
Más participación,más deliberación y más organización

mariló dijo...

Creo que por derecha o por izquierda los comentarios,sucitan un interesante debate.
Ya no son peleas estériles,son análisis de palabras,contenidos,acciones que se confrontan con la realidad.
Por fín ese extraño en casa,servirá para abrir mentes y corazones.
Por otra parte si estos son los enemigos,Caparrós,Solanas.
Me quedo más tranquila...

Mariano Abrevaya Dios dijo...

Recibo sus correos desde, creo, el conflicto con las patronales del agro.

Hoy entré por primera vez a su espacio y las quiero felicitar por el trazo y la hendidura de sus palabras e ideas.

Sigan así, compañeras.

Gloria dijo...

Obediente empleado Caparrós:
Comenzó mal su nota, tal como siguió y terminó.
Nos ha provocado mayor aprecio y valoración hacia "Esa mujer".
Si detesta el “Péguele a Cristina” ¿A qué vienen tantos exabruptos?
¿Cómo puede afirmar con tanta liviandad que su presencia (Refiriéndose a Cristina) “acabó con años de avances en la condición de la mujer argentina”? ¿Quién antes había logrado posicionarnos y avanzar? ¿A qué le llama avanzar? Sospecho que prefiere a la mujer en el “cocine-limpie-lave-planche”, el que hayamos conseguido trabajo fuera del hogar y ocupado espacios políticos para usted es un retroceso, no cabe otra explicación.
Empleado Caparrós, usted ve mal que nuestra Presidenta “usó su condición de mujer desde el principio” ¿Qué hubiese dicho en caso contrario?
Cristina no se empeñó en demostrar lo que usted esperaba, SÍ lo que la mayoría esperábamos: Que una MUJER con mayúsculas no se deje avasallar por machos ni detractores sin dejar de lado su femeneidad; ha demostrado tener mayor capacidad que cualquier otro gobierno desde el 83 a la fecha. Ocuparon el cargo pero no tuvieron poder.
Si la importancia, como dice, NO es el sexo sino el poder ¿A qué vienen tantas referencias al género y nada a su gestión gubernamental?
¿”Dependencia y sumisión al poder del marido”, “instrumento en manos de un hombre”? Son afrentas que sólo escuché de pseudos-periodistas sumisos, simples instrumentos en manos de empresas que no tuvieron reparo en abollar el título y deshonrar la profesión.
Dice usted: “millones de mujeres siguieron a Eva Duarte porque, con ella, votaron por primera vez”. ¿Es lo único que recuerda de Evita? Bueno, bueno, es acá cuando me doy cuenta dónde está la raíz de su crispación y envanecimiento: la condescendiente necedad.
La ignominia se le hizo carne en su cuerpo de macho frustrado y trata, no por convencimiento y razonamiento propio, de pergeñar un plan ajeno, recuerde que en estos tiempos de globalización informativa, en un par de años, cuando por sus obras se reconozca y valore a la presidenta, usted no podrá resistir a este archivo. Debería pedir perdón.
Ojalá pudiese dirigirme a usted con el término “periodista”, recuerdo que en otra época lo fue.


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